Este ninja lo hice durante el confinamiento del pasado mes de abril. Fue el primer amigurumi que terminaba y aunque no quedó todo lo bien que podría, para ser el primero que llega a buen puerto no está mal. Para los ojos utilicé dos botones normales. Para próximas veces a lo mejor me animo con los ojos de seguridad. Pero ya veremos. Este así, con sus botones y todo, no ha quedado mal.
La carita es un simple trozo de fieltro color carne recortado y cosido con hilo.
Lo que menos me gusta es que la lana era excesivamente gorda y los puntos quedan un poco abiertos y se ve un poco el relleno. Pero cumple su función y es resistente, porque juegan con él y aún no se le ha salido nada.
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